lunes, 11 de febrero de 2013

Ten un poco de humanidad

¿Me dejan ustedes frivolizar un poco? Es curioso además que el corrector me subraye el verbo. ¿Es una señal? ¿No debería hacerlo? No se asusten, si esta entrada me la inspirado el telediario. Vale. Sí. Es verdad. Ha sido el telediario de TeleCinco. Pero no tiene nada que ver, que no es la única cadena que lo hace. Aunque eso es lo que menos me importa, o lo que más. Bueno, no sé. Hay cosas que veo que al final me hacen dudar hasta estas cosas... Tan convencido que estaba yo de escribir estas letras.

Vamos a ver. Que viendo las noticias me surge una duda. ¿Tan importante es la vuelta de Gran Hermano como para incluirlo en las noticias? Al parecer sí. Y puedo estar un poco de acuerdo. No. No se me ocurriría engañarles en este aspecto. Que yo lo voy a ver, que yo he visto los otros trece en su mayoría, que yo no niego que lo veo... Ya les digo que yo lo voy a ver... Hoy puedo y me apetece. Y estoy seguro de que el programa (en su decimocuarta edición) volverá a tener éxito. No sé si más o menos que otros años, pero seguro que lo verá mucha gente que después lo negará.

¿Por qué esa obsesión? Yo soy capaz de reconocer que lo veo y, al mismo tiempo, soy capaz de reconocer la poca calidad intelectual del mismo. Pero es que yo no lo veo por eso, o sí. Me explico. Que yo lo veo porque a lo largo del día (por mi trabajo o por ser como soy) pienso mucho, tengo que utilizar mucho mi cabeza, y cuando estoy en casa me apetece descansar, me apetece ver en la televisión algo que me permita no pensar, algo que permita desconectar, algo que me haga olvidar mis problemas.

Y eso me llega a preocupar un poco. Quiero decir, la vida de la gente, de unas personas que no conozco, que no hacen mucho en sus vidas ni en el programa, cuya mayor aspiración (e inspiración) es, precisamente, salir en un programa de telerrealidad, para ser famosos, o intentarlo, o conocidos en ese mundillo. La vida de esa gente es la que me tranquiliza y me entretiene, la que me permite no pensar y desconectar, la que me ayuda a pensar en positivo (qué suerte tengo de ser quien soy, de ser como soy, de tener lo que tengo...), esas personas se hacen como modelos (aunque en positivo solo de la gente con dos dedos de frente: eso es lo que no quiero ser, esa actitud es la que no quiero tener, esa es la gente que no quiero que se cruce en mi camino...)

Y cosas así son las que me hacen pensar las noticias. El que Pedro Piqueras haya dicho que se estrena en TeleCinco esta noche un programa que "puede convertirse en el más longevo de la televisión" me hace plantearme si todo eso que yo pienso cuando defiendo Gran Hermano lo piensa también toda la audiencia que ha hecho que ese programa llegue a tener 14 ediciones en España. Es entonces cuando pienso en lo más profundo (y poético) de la humanidad (y de la expresión "tener un poco de humanidad"): cuán empático es el ser humano para sentirse tranquilo (y un poco superior) con la desgracia ajena. Esto es así.

Palabra de seguidor de Gran Hermano.

Pd.: No es posible... ¿U2 para promocionarlo?