viernes, 16 de diciembre de 2011

Los despilfarros del PP en Salamanca

EL CASO DEL ALQUILER DEL EDIFICIO DE ISCAR PEYRA

En 2005, los locales del ayuntamiento se quedaron pequeños, así que el PP optó por alquilar al obispado un edificio de la calle Iscar Peyra. El contrato por 20 años costaría 36.000 euros mensuales más el IVA y el IPC anual. Tras el traslado se comprobó que el local era inadecuado. Así que los ediles del PP ordenaron derruirlo y construir otro de casi cuatro millones de euros. Más dos años de alquiler mientras duraron las obras. Naturalmente la nueva construcción seguiría perteneciendo al Obispado. Para acallar rumores se incluyó una opción de compra, ejecutable a la mitad de la vigencia del contrato. O sea que a la próxima corporación le tocará decidir si paga 12 millones de euros (más el IVA y el IPC, claro), aparte de la construcción. Menos el 50 por ciento de las rentas de los dos primeros años y el 30 por ciento de las restantes. Así que este capricho del PP nos costará 18,6 millones más el IVA. Por un edificio que, según el servicio de valoraciones de la Junta de Castilla y León, valía menos de seis millones cuando se adquirió. Y si no se compra, el PP le regalaría al obispado el nuevo inmueble y veinte años de alquiler.

EL ESCÁNDALO DE LOS EXPEDIENTES PRESCRITOS

El anterior Plan de Urbanismo permitía que los constructores trasladaran los derechos de edificabilidad desde una parcela a otra. Así que los compraban baratos en un barrio alejado y los trasladaban donde su valor era muy superior. Pero era preciso abonar al ayuntamiento una parte de esta plusvalía. Una cantidad que nunca abonaron algunos de ellos. Los expedientes abiertos se guardaron en algún cajón hasta que prescribieron. La cantidad total que se dejó de ingresar por este concepto fue de veinte millones de euros (como todas las obras municipales realizadas en un año). Mientras el precio del autobús ha subido más de un 40 por ciento en cuatro años.

EL SAINETE DE LAS CASAS DE LA MURALLA

Una aciaga mañana a alguno de los dilectos ediles del PP, se le ocurrió que unas casas adosadas a la muralla impedían la contemplación de sus restos, así que había que derribarlas. En lugar de iniciar un proceso de expropiación, alguien olvidó cerrar el riego del Parque de Calixto y Melibea. El agua filtrada derribó parte de la muralla sobre las casas y, a las ocho de la mañana, se expulsó por la fuerza a sus habitantes y se anunció el derribo forzoso. Los damnificados llevaron el caso a los tribunales. Resultado: se ha tenido que pagar el alquiler de las viviendas en que los vecinos fueron realojados, la vigiancia policial permanente para impedir robos y el precio de la expropiación. Además, una vez derribadas algunas, se ha descubierto que sujetaban la peña, que se derrumbó en cuanto desaparecieron. Hubo que construir un muro, caro y más antiestético que las casas. El coste puede calcularse en casi cinco millones de euros.

EL MISTERIO DEL PUENTE DE SAN JOSÉ.

En 2000 se inauguró el Puente Príncipe de Asturias. Una decisión correcta. Pero se procedió incorrectamente a la expropiación de los terrenos para construir la avenida que conduce hasta él. Tras una primera valoración, el ayuntamiento incomprensiblemente solicitó otra, que resultó un millón ochocientos más cara. Nadie pudo comprender por qué el PP aceptó pagar la cantidad más abultada. La oposición socialista ganó un recurso ante los tribunales sobre esta polémica decisión.

EL FIASCO DE LOS CONTENEDORES CULTURALES DE 2002

Para la capitalidad cultural de 2002 el Ayuntamiento construyó el nuevo Teatro Liceo, el Multiusos Sánchez Paraíso, el centro de Artes Escénicas, la Sala de exposiciones Santo Domingo, el Parque Arqueológico San Vicente y el Centro de Arte de Salamanca. Por culpa de la imprevisión e ineficacia del PP, muchos de los edificios no terminaron sus obras hasta después de 2002. Además se produjeron los sobrecostes de costumbre y el pago se prorrogó hasta 2009. En total, los salmantinos abonamos unos dos millones setecientos mil euros más de los presupuestado.

EL CAMBALACHE DE LOS TERRENOS DE LA AVENIDA DE CAMPOAMOR

En 2005 el Ayuntamiento subastó entre promotores privados unas parcelas situadas en la avenida de Campoamor. Como es ilegal vender el suelo público para construir, la decisión fue recurrida judicialmente. El "error" supuso para las arcas municipales unas pérdidas de más de 2.600.000 euros, que hubieron de entregarse como compensación a los licitadores.

EL DESMADRE DE LOS MUSEOS DE AUTOMOCIÓN Y COMERCIO

Otras de las caracterísiticas de la gestión municipal realizada por el PP en Salamanca es que sus proyectos salen siempre anormalmente caros. Ocurrió, por ejemplo, con la gestión de los museos de Automoción y Comercio. El primero se incrementó en casi un millón de euros. El segundo en unos 450.000. Entre los dos perdimos casi millón y medio de euros.

UN COLECTOR CARÍSIMO

Lo mismo se puede aplicar al proyecto del colector del margen derecho del Tormes, cuya primera fase, presupuestada en 1.118.164 euros, costó 1.857.737.

EL ALTO PRECIO DE LAS FLORES

El parque de Huerta Otea fue iniciado a comienzos de la legislatura anterior. El dinero fue aprobado durante el gobierno del PP, pero se construyó con el PSOE en el poder. Así que permaneció año y medio sin inaugurar. Este abandono tuvo como consecuencia la desaparición de la mayoría de las especies arbóreas y muchos actos vandálicos con un coste que puede calcularse en casi 130.000 euros.

EL FANTASMA DEL PLAN DE MOVILIDAD

Con objeto de resolver nuestros problemas de tráfico, el ayuntamiento pagó a una consultora la elaboración de un plan de movilidad. Costó más de 150.000 euros. Pero como aconsejaba propuestas próximas a las planteadas por el PSOE y, en cambio, rechazaba alguno de los proyectos estrella del PP, nunca fue puesto en práctica.

EL EXTRAÑO ASUNTO DEL NONATO CENTRO DE RECEPCIÓN DE TURISTAS

Una de las carencias que se observan en esta ciudad es un centro de recepción de turistas. Se pretendió construir en la Vaguada de la Palma, pero la UNESCO lo desaconsejó. Hasta ahora se han gastado 29.000 euros en proyectos imposibles de ejecutar porque esta corporación municipal ha sido incapaz de proponer un lugar alternativo viable.

LA OBSESIÓN DESTRUCTIVA POR LA PESQUERA DE TEJARES

La pesquera de Tejares es un enclave de nuestra ciudad que tiene cinco siglos de antigüedad. Pero el PP quiere derribarla para cambiar el curso del Tormes y establecer el parque central de maquinaria del servicio de basuras, un proyecto al que el Grupo Socialista se opone. El derribo de la presa, si finalmente es autorizado, costaría cerca de un millón de euros. El parque de maquinaria costaría otro millón y medio, del que la concesionaria ha tenido que gastar una parte por exigencias del ayuntamiento, al que sin duda reclarmará daños y perjuicios.

EL ARBITRARIO DESPIDO DE LOS TRABAJADORES CULTURALES

Una de las acciones más incompresibles del todavía partido gobernante en el ayuntamiento fue el despido de los trabajadores de las fundaciones culturales. Costó 725.000 euros en indemnizaciones. Para después contratar a otros empleados que hacen el mismo trabajo que los anteriores.

EL BARCO MISTERIOSAMENTE INCENDIADO

Otra decisión caprichosa fue la retirada de un célebre barco fluvial, una cafetería anclada a las orillas del Tormes. De repente, al PP se le ocurrió que había que quitar de "su" río ese estorbo y comenzó un acoso prolongado durante años. Tras un oportuno incendio fortuito en el que, según los propietarios de la nave, los bomberos no acabaron de demostrar su habitual eficacia, quedó convertido en un montón de chatarra, irregularmente retirada por los servicios municipales. Los perjudicados ganaron en los tribunales una indemnización de 200.000 euros.

LOS CATÁLOGOS QUE NUNCA SE DISTRIBUYERON

Finalmente, un caso que demuestra la falta de control del gasto habitual en la alcaldía del PP. En 2002 el Ayuntamiento gastó 347.000 euros en catálogos de la Fundación Salamanca Ciudad de Cultura, que nunca fueron repartidos, y acabaron en un almacén o entregados cuando la capitalidad cultural había pasado a la historia.